La 'Pantera', como le llaman en el vestuario, es una de las grandes bazas de Diego Pablo Simeone para abatir al Olympique de Marsella.
El muslo izquierdo le ha dado dolor de cabeza en las últimas semanas. Se le achacó a Simeone ponerle incluso en la vuelta de semifinales ante el Arsenal, partido que Costa acabó reventado.
Pero no sufrió ningún problema, "sólo un calambre", dijo a los periodistas. Costa jugó, marcó y ayudó a meter al Atlético en una final. La bestia rugió. Ahora llega con el colmillo afilado.
Ha que recordar que el delantero hispano-brasileño llegó lesionado a la final de la Champions de 2014. Forzó y lo acabó pagando: duró ocho minutos sobre el campo.
Fue su último partido antes de esta nueva etapa en la que Costa ha estado varios meses sin competir por la sanción de la FIFA. En lo que va de temporada, lleva 21 encuentros, siete goles y cuatro asistencias.
Se temía con Costa un 'Lisboa 2.0', pero nada más lejos. Jugó ante el Getafe en el último fin de semana y evidenció un estado de forma más que notable. Problemas para el Marsella, armas para el Atleti.