Con un once plagado de estrellas. Con un banquillo con casi más lustre. Así se plantó Francia en Saint-Denis, y desde el primer minuto deslumbró a Colombia con el brillo, el lujo.
Francia salió al campo como un ciclón. Colombia no hizo más que defenderse, prácticamente incapaz de parar las acometidas galas.
Dos tormentos llamados Kylian y Thomas
Las bandas fueron dos autopistas. Mbappé y Lemar disfrutaron como enanos a costa de Fabra y Arias, ayudados por las subidas de Sidibé y Digne.
En una de esas llegó el gol. Centró desde la banda izquierda Lucas Digne, David Ospina no atrapó el balón, tampoco lo despejó adecuadamente, y le cayó franco a un Olivier Giroud que no perdonó, anotando el 1-0.
El vendaval no cesó, y Francia siguió apretando a Colombia. Una jugada de peligro tras otra, con esporádicos acercamientos 'cafeteros' sobre el área de Lloris.
Y Saint-Denis dijo 'oh, lá, lá'
En el minuto 26 un robo en el centro del campo a punto estuvo de convertirse en un contragolpe peligroso para Colombia, pero fue todo lo contrario. Francia recuperó el balón y pilló a su rival a contrapié.
Y 'les bleus' hicieron magia. Condujo Mbappé, acompañado por Giroud y Griezmann. Se la pasó al primero, y se fue hacia el centro. Éste se la puso en la frontal al tercero en discordia, y Griezmann, en vez de reventarla desde el balcón del área, asistió de tacón para que Mbappé continuase la jugada.
El joven y talentoso futbolista del PSG se internó en el área, abrió para Lemar y éste, ante la oposición de Davinson Sánchez, fusiló a Ospina.
La fortuna se alía con Colombia
Parecía que serían los dos primeros goles de un resultado sonrojante, pero apenas dos minutos después, en una afortunada acción, Colombia recortó distancias.
Botó en corto un córner, Muriel, desde el lateral del área, quiso ponerla al primer palo, un centro que nadie tapó, nadie remató, y nadie rechazó. Lloris se comió el amago y el balón se coló en el fondo de sus redes.
El gol fue un mazazo para Francia, que desde entonces no jugó igual. Perdió la chispa arriba. Perdió la magia. Colombia aprovechó sus dudas para terminar de matar el ritmo del encuentro y aunque Griezmann tuvo la última antes del descanso, el marcador no se movería hasta la reanudación.
El principio del fin
En el segundo tiempo nada fue igual. Francia estaba desdibujada por una Colombia que entró al partido con ánimo renovado. Los de Pékerman saltaron al segundo tiempo dispuestos a no dejar jugar con tranquilidad a Francia, y lo lograron.
Muriel avisó al poco de la reanudación, y sería pasada la hora de partido cuando Falcao, a pase de James, igualase la contienda. Y aunque Francia se enrabietó tras el gol, máxime con la entrada de Pogba y Dembélé, el oficio colombiano evitó cualquier tipo de reacción.
Debutaron por 'les bleus' Ben Yedder y Lucas Hernández, éste por la lesión de Lucas Digne. El carrusel de cambios, magnificado al tratarse de un amistoso, evitó que Francia cogiese ritmo de juego y pudiese asumir de nuevo el mando.
Se confirma la remontada
La guinda a la epopeya, el clímax del drama, llegó en el minuto 84. Samuel Umtiti se pasó de frenada y entró con dureza dentro del área sobre Izquierdo. Un penalti tan claro como discutido, que transformó Quintero.
Fue la última puñada a Francia. Una Francia que ha demostrado que, si quiere ser favorita en Rusia, necesita algo más que nombres y una media hora espectacular.
Esta Francia recuerda mucho a la Bélgica de hace 4 años, plagada de grandes figuras con un brillante futuro por delante, y que llegado el momento de la verdad naufragó (aunque alcanzase los cuartos).
Por su parte, Colombia no hizo un mal partido, al menos en conjunto. Pero queda claro que necesita mejorar, aunque haya logrado ganar remontando a Francia en París.