Antes de su aparición, la Liga Mexicana de fútbol se jugaba en estadios con tribunas de madera, como los de los equipos España y Necaxa y el mismo Parque Asturias, el más importante de su época, pero la llegada del entonces llamado Estadio Olímpico de la Ciudad de los Deportes trajo consigo las tribunas de cemento.
El Estadio Azul se abrió el 6 de octubre de 1946 con partidos de fútbol americano, entonces de moda en la capital, que en aquella época tenía poco menos de dos millones de habitantes. Actualmente la urbe tiene 20 millones.
Este fin de semana, Cruz Azul, cuarto equipo con más títulos en el balompié azteca, con ocho, recibió Morelia en el último partido de fútbol en la historia del estadio, la nostalgia cayó sobre la Ciudad de México, que atestiguó el principio del fin del Estadio Azul.
22 de abril de 2018