"Se dicen muchas tonterías del PSG. Y hay cosas que no se pueden negar, que son un bazar, que hay jugadores que no hablan, que el entrenador no tiene autoridad… ¿pero qué circo es éste?", espetó Tapie en una entrevista concedida a 'CNews'.
El ex mandatario del Marsella siempre se ha caracterizado por no guardarse nada, y por hacer gala de una sinceridad que bordea lo ofensivo.
"Al fin sus líderes se darán cuenta de que un entrenador está para entrenar, y que los jugadores tienen que hacerle caso, en las buenas y en las malas decisiones", continuó diciendo en la citada entrevista.
También se llevó su ración de 'palos' Neymar, la estrella del equipo. "Nunca, en mi vida como aficionado al fútbol había visto un lío como éste, es que es inimaginable", comentó, sobre los problemas que genera Neymar, insinuando que el PSG pone por delante el bienestar del jugador al grupo.
La rivalidad entre Marsella y París no es nueva, y los aficionados al club de la Costa Azul celebran como si fuera un triunfo propio cada descalabro del PSG.
Tapie no desaprovechó la oportunidad, aunque el polifacético empresario, que fue de actor y cantante a político. Llegó a ser ministro del gobierno francés del Primer Ministro Pierre Bérégovoy (en tiempos de Miterrand), y después miembro de la Asamblea Nacional, hasta su caída en desgracia.
Se caracterizó en aquellos años por adquirir empresas o negocios en la ruina (como Adidas, a cuyo frente estuvo entre 1990 y 1993), para luego venderlos por cantidades millonarias, aunque no siempre salieran bien.
Sin embargo, sus negocios no siempre fueron del todo limpios y Bernard Tapie terminó siendo condenado a dos años de prisión. Y su equipo, el Olympique de Marsella, fue despojado de un título liguero por amaño de partidos.
Tapie fue recientemente noticia tras hacerse público que sufre un cáncer de estómago, tras lo que la afición del Marsella se volcó en el que fue el presidente en los mejores años de la entidad, pese al borrón final.