Sepsi y Poli se enfrentaban en las eliminatorias de la Liga Rumana cuando, en cuestión de segundos, el fútbol pasó a un segundo plano. Harut cayó al suelo tras un choque con Kuku y las alarmas saltaron de forma inmediata.
Los jugadores, sobrepasados por la angustia del momento, veían cómo su compañero quedaba completamente inmóvil sobre el verde, lo que provocó la entrada de la ambulancia y su posterior traslado a un centro hospitalario.
Tres horas más tarde del incidente, se conoció las primeras novedades sobre su estado que, por desgracia, iba mejorando. "Según la primera información del hospital, Harut se ha recuperado, está consciente y puede comunicarse con los demás. Al futbolista se le realizarán más análisis y se mantendrá bajo vigilancia", aseguró al medio rumano 'sport.ro'.