Piqué marcó ante el Espanyol el 1-1 y el central lo celebró mandando callar a la afición 'perica' después del famoso "Espanyol de Cornellà".
Competición investiga el gesto de Piqué tras la denuncia de LaLiga para determinar si el 'culé' debe ser sancionado o no.
Y es que LaLiga comunicó tras el derbi catalán que, desde entonces en adelante, "las celebraciones de goles ofensivas que han ocurrido otras veces, que no son reflejadas en el acta arbitral, y que pueden generar crispación o que son contrarias al buen orden deportivo, siempre han sido rechazadas por parte de esta Liga, que no dudará, a partir de ahora, en dar traslado de las mismas al Comité de Competición para que depure las responsabilidades oportunas, mediante la incoación - si considera que existen indicios mínimos razonables de la comisión de una infracción disciplinaria-, instrucción y resolución del correspondiente expediente sancionador".
El pasado sábado, el Zaragoza dio la sorpresa en el Nou Estadi y se llevó los tres puntos tras ganar por 0-2, pero la polémica vino en la celebración del segundo tanto.
Borja Iglesias anotó el segundo gol con una definición precisa y de gran calidad tras una mal medida salida de Dimitrievski y lo celebró mandando callar a la afición local.
El jugador del conjunto maño completó su 'vendetta'. En la primera vuelta, en La Romareda, fue expulsado injustamente por una supuesta agresión sobre el portero que nunca existió, como se pudo ver después en las imágenes. Dimitrievski fingió y el árbitro picó. El Comité le quitó la roja y él silenció a la grada, algo por lo que podría ser sancionado.