Según adelantó 'La Voz de Galicia', el cuadro chino sorprendió al gallego ofreciendo 15 millones de euros en lugar de los 20 pactados, provocando una ruptura instantánea de la operación.
Después de que Maxi Gómez aceptase irse a la Superliga China, el futuro del uruguayo se acerca de nuevo al fútbol español.
Mientras se resuelve la oferta final por el delantero, en el Celta de Vigo se mantienen estoicos en sus pretensiones económicas.