El cuadro 'verdolaga' hacía historia. El conjunto colombiano terminó la fase de grupos como el mejor primero -con 16 puntos-, y dejó por el camino en las eliminatorias a equipos como Huracán, Rosario Central y Sao Paulo.
Esta temporada, los de Reinaldo Rueda comenzaban el nuevo torneo como máximos aspirantes a revalidar título, con un equipo renovado después de las importantes bajas de Alejandro Guerra y Miguel Borja y encajado en un grupo complicado: Botafogo, Estudiantes de La Plata y Barcelona Guayaquil.
A pesar de los numerosos refuerzos, como Dayro Moreno, Nacional no encontró en ningún momento su estilo de juego y desde el primer partido (derrota ante Barcelona) se preveía una caída libre.
En la segunda jornada, los 'verdolagas' cayeron por 0-2 en casa contra Botafogo, y en la tercera volvieron a perder ante Estudiantes (1-0). Tres derrotas en los tres primeros enfrentamientos, una losa imposible de levantar.
La victoria ante el cuadro argentino por 4-1 en la cuarta jornada dio esperanzas, pero su nuevo derrota frente al equipo brasileño este jueves certificó su eliminación matemática.
Del cielo al infierno en tan sólo un año, de ganar la Libertadores a caer eliminado en primera ronda. Fracaso rotundo para un equipo que pretendía conquistar el paraíso de nuevo.