Cuando festejaron el trofeo, se pusieron las camisetas del revés, de tal forma que se vieran los nombres en la parte delantera y no el escudo de Inglaterra.
"Entiendo que en un momento de éxtasis estos chicos no pensaran fríamente, pero deben comprender que el equipo que representan es lo más importante", señaló Gareth Southgate a 'The Guardian'.
El seleccionador inglés cree que no fue un comportamiento adecuado. "Lo primordial es el escudo que llevan en la camiseta, no el nombre de la parte posterior", declaró.