Y es que Gareth Bale no ha tenido una vida precisamente sencilla. Más allá de los focos del fútbol, el galés ha vivido experiencias que no muchos han tenido que pasar a lo largo de su vida. Superestrella mundial del fútbol, pero con muchos problemas en casa.
Empezamos por su suegro. Un año antes de fichar por el Real Madrid, Martin Rhys-Jones fue encarcelado de forma preventiva en España por perpretar una gran estafa. Engañó a 250 personas y se hizo con 2'5 millones de euros gracias a una oficia de telemarketing. En 2013 fue extraditado a Estados Unidos, donde no salió de la cárcel hasta del pasado junio. "Se ha movido únicamente por la avaricia", sentenció la juez.
Bale y Emma Rhys-Jones, su pareja, habían retrasado su boda hasta que su suegro saliera de la cárcel. Por eso planearon su enlace para el pasado verano. Pagaron medio millón de euros para alquilar el islote donde el galés le pidió matrimonio. Lo que no sabían era que tendrían que volver a cancelar la boda.
¿Cuál fue el motivo? Una prima de la mujer de Bale, Epiphany Dring, huyó a Malasia con una maleta cargada de cocaína, relejos y una importante suma de dinero. Todo estaba cifrado en torno a 1'5 millones de euros. Y lo peor era que el lote pertenecía a una banda de narcotraficantes.
Pero no se acaba ahí el problema con los narcos. La Policía encontró en la chimenea del tío de Enma 112.000 euros también pertenecientes a la banda. Lo que provocó un hostigamiento de los mismos narcos a la casa de los abuelos de la familia política de Bale. Le rompieron ventanas con piedras y ladrillos... y hasta la metieron una bomba en el buzón.
Los narcotraficantes quemaron los coches de sus tíos Anabella y Graham McMurray, también relacionados con el narcotráfico y que fueron detenidos por el blanqueo procedente de la venta de drogas. Algo que motivó a Bale a reforzar todas sus medidas de seguridad al extremo. Tanto es así que, según 'The Sun', Bale se gastó 560.000 euros para contratar ex militares británicos que protegieran su casa de Vale of Glamorgan (Gales).
Meses después, Bale y Enma habían planificado de nuevo su boda. Pero hace unos días Alexander, prometido de la hermana de su novia, apareció muerto. Vivía en Ibiza en una comuna hippie junto con sus hijos bajo una aparente normalidad. Según la citada fuente, eran felices y nadie se explica lo ocurrido, ya que el suicidio es la primera opción que baraja la Policía.
"En el club se tiene la sospecha de que Bale está somatizando todos esos problemas familiares. El concepto que se tiene de él es excelente, es un deportista con un comportamiento ejemplar, muy buena persona, pero está sometido a un nivel de estrés brutal por sus temas familiares, que podrían estar incidiendo en sus problemas musculares", desveló una fuente del Real Madrid a 'El Mundo'.