Aunque el puesto de Tony Pulis estaba en juego, el partido arrancó con el cuadro 'blue' asumiendo el protagonismo y avalanzándose sin piedad sobre el equipo local.
A pesar del 'susto' inicial de Salomón Rondón, 17 minutos tardó Álvaro Morata en adelantar al Chelsea, tras una soberbia jugada de Eden Hazard, que dejó atrás a Gareth Barry y exigió una gran parada de Ben Foster.
Pistoletazo de salida de la exhibición del belga, que firmó su primer tanto en el ecuador del primer tiempo, aprovechando una asistencia de Cesc Fábregas.
El segundo gol expoleó al West Brom, que trató de reducir la distancia antes del descanso. Sin embargo, Marcos Alonso firmó el tercero en el minuto 38.
La diferencia en el marcador fue una losa para el equipo local, que dio ciertos síntomas de impotencia y sólo pudo defender para evitar una goleada mayor.
Cumplida la primera hora de encuentro, Hazard se erigió como hombre del partido marcando su segundo tanto del partido, el cuarto de un Chelsea que da un salto en la clasificación de la Premier League.