"Siempre pienso en los buenos recuerdos. Con mi abuelo no he tenido ningún mal recuerdo y hoy estará contento de ver que mi familia ha crecido y de que yo soy un hombre feliz en mi trabajo. Estoy muy feliz de estar aquí por más de 10 años. Si no fuera por él, yo no estaría aquí", dijo Marcelo.
Marcelo hace historia con el Real Madrid e incluso se está ganando el derecho de ser comparado con el legendario Roberto Carlos. El brasileño perdió a su abuelo Pedro durante el Mundial de Brasil (sufría cáncer) y vivió entonces las peores horas de su vida.
El jugador blanco siempre recuerda con orgullo que era su abuelo quien le daba el dinero (13 reales) para que pudiera coger un transporte y entrenar con su equipo. La madre de Marcelo, maestra, le regañaba por las malas notas y le castigaba sin fútbol. Pero su abuelo Pedro siempre conseguía que 'su' Marcelo jugara.
Marcelo lleva tatuado su nombre en el brazo y siempre se lo besa cuando marca algún gol. Cuentan que el lateral le dio su primer sueldo como futbolista a su abuelo Pedro.
"A mí no me gustaba el fútbol 11. Mi abuelo Pedro, que fue jugador, me decía: 'Ve, que te va a gustar'. Yo me negaba. Sólo quería jugar al fútbol sala. Pero, al final, jugué un campeonato a la fuerza. Me pusieron de extremo y de lateral. Y ahí me quedé", confesó en su día Marcelo. Todo gracias a Pedro.