Conoce al español con mejor promedio goleador que Leo Messi

El mundo del fútbol es tan impredecible que nunca sabes cuándo te va a llegar el éxito. A veces despuntas joven y otras tienes que esperar a ser un jugador más hecho y ya veterano para triunfar.

Es precisamente este último caso el de nuestro protagonista, el atacante bilbaíno Igor Angulo. El futbolista del Górnik Zabrze puede presumir de tener mejor promedio goleador que Messi en lo que va de 2017 de acuerdo a un informe de ProFootballDB.

Este canterano del Athletic, un jugador ya muy experimentado, ha sabido sacar provecho de su astucia en el área para ser la gran estrella de la Liga Polaca. Lleva 22 tantos en 16 partidos con una media de 1,33 goles por partido. Messi, el rey del fútbol mundial, se queda cerca, pero no consigue superarle con su marca de 1,26 goles por partido.

No es el único que mejora a Messi, pues hasta siete jugadores tienen mejor promedio que él, pero sí el más importante, ya que actúa en una liga europea de cierta repercusión y que cuenta con rivales que han pisado la Champions en las últimas campañas como el Legia de Varsovia.

Tras formarse en el Athletic, Angulo tuvo que ganarse la vida en equipos de menor repercusión dentro del fútbol español, entre los que destaca su paso por Nàstic, Numancia, Écija o Real Unión. Tras brevísimas experiencias en Cannes o en el Enosis Neon Paralimni chipriota, Angulo decidió dejar definitivamente el fútbol español en 2014, cuando se fue al Apollon Smyrnis griego.

De allí pasó al Platanias y en el pasado 2016 recaló en el Górnik Zabrze, donde desde 2017 es un goleador implacable. "La verdad es que estoy en racha, tengo suerte y me entra todo", reconocía Angulo en las últimas fechas.

"A mí siempre me ha ido bien en el extranjero, pero Polonia no es un país fácil para un jugador español y he tenido que tirar de capacidad de adaptación", añadía un Igor Angulo que llegó para ascender con el equipo polaco y, en la temporada que acaba de comenzar, ha mantenido su excelente promedio goleador.

No le llamarán los grandes equipos ni se fijarán en él los grandes ojeadores, pero un día podrá presumir de haber tenido más olfato goleador que uno de los mejores jugadores de la historia. Casi nada.