A Luis Suárez, como a cualquier futbolista, le motiva la Champions. Tiene entre ceja y ceja el uruguayo levantar una segunda 'orejona' con el Barça, pero para ello deberá mejorar su puntería cuando juegue a domicilio.
Porque Suárez no ve puerta fuera de casa en Champions desde el 16 de septiembre de 2015. El Barça jugaba en Roma y Suárez adelantaba a su equipo, aunque después un gol que dio la vuelta al mundo de Florenzi puso el definitivo 1-1.
Desde entonces, el uruguayo no sabe lo que es marcar cuando se monta en el avión y viaja por Europa. El Barça lo echó de menos en este tiempo, sobre todo en la pasada edición de la Champions, en la que sólo pudo anotar tres goles en nueve encuentros.
Suárez, que regresó a su cita con el gol en Girona, tiene la oportunidad de dejar atrás la mala racha en Lisboa y volver a enseñar la garra de sus celebraciones lejos del Camp Nou.